lunes, 20 de septiembre de 2010

Netiqueta Joven para Redes Sociales: ciudadanía digital y ciberconvivencia

Netiquétate: netiquette para social networkingNetiqueta quiere decir ‘normas de etiqueta en la Red’ o, dicho de otra manera, compendio de indicaciones para guardar las buenas formas en Internet. Se trata de un conjunto de sugerencias que nace por convenio entre las personas que comparten un espacio común, una aplicación, un servicio determinado en Internet. No tienen validez legal y son complementarias a las normas generales de uso, las reglas del servicio, que pueda tener cada website o aplicación online. Si no se respetan, se pueden causar molestias y la persona responsable puede ser ignorada e incluso repudiada por el resto de la comunidad de usuarios.


Son pautas que facilitan la comunicación y la convivencia digital. Cuando el conjunto de personas que comparten un lugar en la Red las respetan, el ambiente es mucho más agradable, satisfactorio e interesante. Es por ello que han surgido de manera espontánea desde el inicio de la comunicación online. Las hay generales para Internet o específicas para los chats, los foros, los blogs… Son convenios que cambian con el paso del tiempo debido a la evolución de la Red y sus aplicaciones y, por supuesto, al cambio en las características e intereses del conjunto de usuarios que las comparten.


La Netiqueta Joven para Redes Sociales ofrece pautas para la convivencia online y sirve de referente para el ejercicio de la ciudadanía digital. No se trata de una lista de consejos de seguridad para evitar riesgos propios o ajenos. Sin embargo, las buenas formas, la cortesía y el respeto por los demás implican también no perjudicar su seguridad ni privacidad. Al mismo tiempo, es preciso ayudar a los demás a que sean buenos convecinos online y no nos causen molestias, ni siquiera de manera involuntaria.


La Netiqueta Joven para Redes Sociales está pensada por y para los adolescentes y jóvenes que disfrutan de su vida online en redes sociales como Tuenti, Facebook, Hi5, Bebo, Orkut, Fotolog… Tiene como finalidad mejorar su experiencia online en estos nuevos entornos de socialización intensiva. Contribuye a mejorar la ciberconvivencia y a evitar conflictos, potencia el sentimiento de pertenencia a la comunidad y de corresponsabilidad, y deviene, en definitiva, en el ejercicio y construcción de la ciudadanía digital activa como garante imprescindible de los derechos y deberes individuales y colectivos.


Cuenta con 16 enunciados articulados en tres fines principales:



  1. Guardar consideración y respeto por las demás personas.

  2. Preservar la privacidad ajena.

  3. Contribuir al buen ambiente de la Red.



Netiqueta Joven para Redes Sociales


Muestra consideración y respeto hacia los demás:



  1. Pide permiso antes de etiquetar fotografías subidas por otras personas. Puede ser que a pesar de estar publicadas online no sea conveniente estar etiquetado para alguien.


  2. Utiliza las etiquetas de manera positiva, nunca para insultar, humillar o dañar a otras personas. Ayuda a crear el ambiente agradable y de confianza que a todos nos gusta compartir.

  3. Mide bien las críticas que publicas. Expresar tu opinión o una burla sobre otras personas puede llegar a vulnerar sus derechos e ir contra la Ley. La libertad de expresión termina donde comienzan los derechos de los demás. La injuria, la calumnia y otras acciones contra el honor o la intimidad son delitos.

  4. No hay problema en ignorar solicitudes de amistad, invitaciones a eventos, grupos, etc. Si lo hacen contigo, no insistas ni pidas explicaciones.

  5. Evita la denuncia injusta como spam para no perjudicar a quienes hicieron comentarios correctos. La información abundante, interesante y veraz es un tesoro.

  6. Usa las opciones de denuncia cuando esté justificada la ocasión. Realizar acusaciones a la ligera o de manera injusta genera desconfianza y enfado.


Cuida la privacidad de las demás personas:



  1. Pregúntate qué información de otras personas expones y asegúrate de que no les importa. En ocasiones contamos aspectos de nuestra vida con otras personas o de la vida de los demás sin tener en cuenta cómo les puede afectar que eso se sepa. Respeta la privacidad de los demás como te gustaría que respetasen la tuya.

  2. Para etiquetar a otras personas debes hacerlo sin engaño y asegurarte de que no les molesta que lo hagas.
    Cuando etiquetas a alguien estás aportando mucha información que además, en muchos casos, se propaga de forma inesperada e incómoda.

  3. No puedes publicar fotos o vídeos en las que salgan otras personas sin tener su permiso, como regla general. La imagen (fotografía, vídeo…) de cada cual es un dato personal y el derecho a decidir cómo se utiliza le pertenece a esa persona en exclusiva.

  4. Antes de publicar una información que te han remitido de manera privada, pregunta si lo puedes hacer.En las redes sociales, la información circula con demasiada velocidad de un lado a otro y lo que es privado se puede convertir en un secreto a voces.



Contribuye al buen ambiente de la Red:



  1. Facilita a los demás el respeto de tu privacidad e intimidad. Comunica a tus contactos, en especial a los nuevos, cómo quieres manejarlas. Deja claro tu criterio para que lo puedan respetar diciéndoles qué cosas no admites como, por ejemplo, que reutilicen fotos que puedan ver en tus álbumes privados, que te etiqueten sin permiso o que expongan datos acerca de ti en páginas a la vista de otros.

  2. Recuerda que escribir todo en mayúsculas puede interpretarse como un grito. Se trata de un acuerdo, de una norma no escrita que muchas personas utilizan. Tenerla en cuenta no supone esfuerzo y ayuda a entenderse bien en cualquier circunstancia.

  3. Usa los recursos a tu alcance (dibujos, símbolos, emoticonos…) para expresarte mejor y evitar malentendidos.
    El estado de ánimo, las diferencias culturales o sociales, las experiencias previas… pueden dificultar la comunicación entre dos personas, más aún si ni están cara a cara. Comprender y utilizar símbolos de apoyo te ayudará a esquivar problemas por malas interpretaciones.

  4. Ante algo que te molesta, trata de reaccionar de manera calmada y no violenta. Nunca actúes de manera inmediata ni agresiva. A veces las cosas no son como parecen. Puede que simplemente busquen la provocación o el engaño y si se reacciona mal habrán conseguido su objetivo. Puede tratarse también de errores o acciones no intencionadas.

  5. Dirígete a los demás con respeto, sobre todo a la vista de terceros. Si alguien comete algún error, imprudencia o te molesta, sé amable al hacérselo ver y, si es posible, hazlo en privado.

  6. Lee y respeta las normas de uso de la Red Social. No todas las redes sociales (Tuenti, Facebook, Hi5, Bebo, Orkut, Fotolog…) tienen las mismas reglas. Sin embargo, siempre son las reglas de juego de obligado cumplimiento para todos.



Más información sobre la Netiqueta Joven para Redes Sociales: Netiquetate.com

Fuente: Jorge Flores para Un Blog en Red, de Red.es.

viernes, 10 de septiembre de 2010

Decálogo para las víctimas de ciberbullying

Ilustración sobre el ciberbullyingCuando se presenta un caso de ciberbullying, es preciso minimizar el daño hasta conseguir acabar con el problema. Este decálogo supone una ayuda para ello.

Se ha recorrido ya un largo camino para sensibilizar e informar sobre la amenaza del ciberacoso. Se ha conseguido llamar la atención sobre este fenómeno para movilizar a la ciudadanía y a las diversas administraciones públicas que, en muchos casos y especialmente en el ámbito escolar, han activado planes y recursos preventivos. Sin descuidar lo anterior, porque la lucha es constante, hay que avanzar un paso más y crear recursos y procedimientos para la intervención… ¿qué hacer cuando se produce un caso? Es preciso establecer tanto servicios de apoyo como protocolos de intervención para la gestión autónoma. Cuando se descubre una situación de este tipo, la comunidad educativa trata de dar una respuesta basada en el conocimiento del bullying tradicional y los planes de convivencia diseñados. Sin embargo, son muchos los matices y diferencias en relación al tradicional acoso escolar y demasiado importantes las consecuencias como para permitirnos el lujo de equivocarnos. Cada minuto que pasa la víctima está a un click de sus acosadores. Intervenir de inmediato y hacerlo de forma adecuada es clave. En ocasiones la iniciativa debe ser de la propia victima y, en todo caso, es precisa su colaboración.

Decálogo para una víctima de ciberbullying




  1. Pide ayuda. Si eres menor recurre a tu padre o tu madre o, en su defecto, a una persona adulta de confianza. Asegúrate de que esa persona conoce y entiende estas pautas para que ambos podáis remar en el mismo sentido y para que, en su ánimo de protección, no haga cosas que acaben siendo perjudiciales.



  2. Nunca respondas a las provocaciones. Hacerlo no te ayuda en nada y, sin embargo, es un estímulo y una ventaja para quienes te acosan. Mantén la calma y no actúes de forma exagerada o impulsiva en ningún caso.



  3. No hagas presunciones. Puede que ni las circunstancias ni las personas que parecen implicadas sean como aparentan. Mantén un margen para la duda razonable porque actuar sobre bases equivocadas puede agravar los problemas y crear otros nuevos.



  4. Trata de evitar aquellos lugares en los que eres asediado en la medida de lo posible hasta que la situación se vaya clarificando. Si se trata de redes sociales o comunidades online no te será difícil. Si el acoso llega por el teléfono móvil, no descartes cambiar de número.



  5. Cuanto más se sepa de ti, más vulnerable eres y más variado e intenso es el daño que pueden causarte. ¿Imaginas una mentira ridiculizándote construida sobre datos privados reales escrita en tu muro?, ¿qué pasaría si alguien, haciéndose pasar por ti, insulta a tus amistades? Es momento, por lo tanto, de cerrar las puertas de tu vida online a personas que no son de plena confianza. Para ello:

    1. Evita intrusos. Para ello debes realizar, en orden, estos pasos:

      1. Realiza un chequeo a fondo de tu equipo para asegurarte de que no tienes software malicioso (troyanos, spyware…) que puede dar ventajas a quien te acosa. Es importante. Dispones de herramientas gratuitas para ello en la dirección www.osi.es.


      2. Cambia las claves de acceso a los servicios online que usas, pero nunca antes de haber realizado el paso anterior. Recuerda que deben ser complejas de adivinar y llevar combinados números y letras.






    2. Depura la lista de contactos. Revisa y reduce la lista de contactos que tienes agregados en las redes sociales (o en otros entornos sociales online).


    3. Reconfigura las opciones de privacidad de las redes sociales o similares en las que participes y hazlas más estrictas. Asegúrate de que sabes bien cómo funcionan estas opciones y sus implicaciones.


    4. Comprueba qué cuentan de ti online. Busca la información sobre ti publicada otras personas y trata de eliminarla si crees que puede ser utilizada para hacerte daño.


    5. Repasa la información que publicas y quién puede acceder a ella y poner, a su vez, al alcance de terceras personas.


    6. Comunica a tus contactos que no deseas que hagan circular informaciones o fotografías tuyas en entornos colectivos.


    7. Ejerce tu derecho sobre la protección de datos personales. Tú decides el uso que se puede hacer de ellos, incluyendo tu fotografía.






  6. Guarda las pruebas del acoso durante todo el tiempo, sea cual fuere la forma en que éste se manifieste, porque pueden serte de gran ayuda. Trata también de conocer o asegurar la identidad de los autores pero, en todo caso, sin lesionar los derechos de ninguna persona.



  7. Comunica a quienes te acosan que lo que están haciendo te molesta y pídeles, sin agresividad ni amenazas, que dejen de hacerlo. Recuerda que no debes presuponer hechos o personas en tu comunicación, por lo que debes medir muy bien cómo lo haces, sin señalar a nadie en público, pero a la vez tratando de asegurarte de que se entera la persona o personas implicadas.



  8. Trata de hacerles saber que lo que están haciendo es perseguible por la Ley en el caso de que el acoso persista. Les puedes sugerir que visiten páginas como www.e-legales.net o www.ciberbullying.com para que lo comprueben por sí mismos.



  9. Deja constancia de que estás en disposición de presentar una denuncia, si a pesar del paso anterior continúa el acecho. Manifiesta que cuentas con pruebas suficientes recopiladas desde el inicio y que sabes cómo y dónde presentarlas. Debes indicar que, si el acecho persiste, te verás obligado a acudir a la policía.



  10. Toma medidas legales si la situación de acoso, llegado este punto, no ha cesado.





Algunas notas que considerar para la puesta en práctica de estas recomendaciones:

  • Aunque son, en su mayoría, pautas de aplicación también para víctimas adultas y fuera del contexto escolar, cuando se deseen transmitir a niños y adolescentes se precisa una modulación en la forma de comunicar el mensaje.


  • Cada caso y persona es diferente. Por ello, estas indicaciones pretenden ser de ayuda, de forma completa o parcial, en los sucesos más comunes.


  • El orden en que se toman las medidas es importante. No obstante, la gravedad de los hechos en algunos casos puede requerir acelerar la ejecución de determinados pasos, reducir el intervalo entre ellos o directamente obviarlos.


  • En casos extremos, la solicitud de ayuda a la policía debe ser inmediata.





Este decálogo es una de las aportaciones de PantallasAmigas al primer Protocolo de Actuación Escolar ante el Ciberbullying desarrollado por el EMICI con la colaboración del Departamento de Educación del Gobierno Vasco. Mientras se ultima su revisión el curso escolar ha empezado y, por ello, deseamos avanzar aquí estas pautas básicas e inéditas para quien le puedan resultar de ayuda.

Fuente: Un blog en Red